Tiene esa belleza tan característica en las musas de Alfred Hitchcock. Alguien la ha descrito como “una fuerza de la naturaleza” y, si estuviera en Hollywood, ya la definirían como “la Venus rubia”. Belén Rueda nació para dejar huella. Aunque empezó haciendo sus pinitos en la danza, su bautismo de fama le llegó en la pequeña pantalla. Sin embargo, ha sido el cine quien le ha abierto las puertas “de par en par” para que triunfe a lo grande. Por su primer trabajo en MAR ADENTRO consiguió el Goya como “Actriz revelación”. Después le llegó el reconocimiento con EL ORFANATO y su consagración con LOS OJOS DE JULIA, donde interpretaba dos personajes de muy distinto calado.
Ostenta el privilegio de «coleccionar» propuestas de trabajo porque ha conseguido ser una de las imprescindibles de nuestro star system cinematográfico. A pesar de todo lo logrado hasta ahora, Belén tenía un sueño que ha conseguido cumplir. Trabajar al lado de Ricardo Darín era «esa asignatura pendiente» que acaba de aprobar en SÉPTIMO. Un thiller de suspense del que poco puede hablar.. «No veas lo difícil que es tener que medir las palabras en una promoción». Y es que, un pequeño fallo en el control de esas palabras, puede desencadenar la «tragedia» de poner al lector sobre la clave del argumento.
Belén tuvo claro que tenía que rodar esta película. «Cuando me propusieron el guión, Darín ya era mi prioridad. Rodar con él justificaba estar en esta aventura. Y ha sido de lo más enriquecedora. Ricardo es un actor magnífico y un compañero de viaje profesional muy generoso e implicado. Ha sido un regalo esta experiencia«. En SÉPTIMO, Belén y Ricardo son un matrimonio separado. Tienen dos hijos que les adoran a ambos. Viven con la madre, pero comparten el tiempo establecido con el padre, que les consiente más cosas al estar menos con ellos. Un simple juego es el desencadenante de la tragedia, una más en la carrera de Belén. Dueña de una belleza dulce y aparentemente frágil, siempre ponen en su camino personajes que exteriorizan todo lo contrario..
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foto Alejandra López (internet) |
“A veces pienso que una desengrasante comedia me vendría bien», me comenta Belén entre pícaras sonrísas, «pero no me olvido tampoco que hacer reir es algo muy difícil, tanto a nivel de guión como de interpretación. Hay que tener un director muy especial para que la comedia funcione. Sería, sin duda, un reto para mí porque me vería en la necesidad de tocar otros matices interpretativos que, tal vez, no he puesto en práctica aún. ¿Sabes lo que pasa?..Yo creo que el físico ayuda mucho a poder hacer personajes muy diferentes y el mío, tal vez, condiciona porque es difícil darle un cambio muy radical. Yo tengo un físico muy normal y creo que la gente se identifica conmigo porque creen que, cualquiera de las historias que me suceden, les pueden pasar a ellos porque son como yo. Hay gente que me ha dicho muchas veces : “No sé cómo has podido superar todo lo que te ha pasado”..Y puedes, claro que puedes. Duele, es duro y nunca lo olvidas, pero sigues adelante porque la vida es muy inteligente. Desde fuera, todo parece más trágico porque te centras en la esencia del problema…pero ¡¡de todo se sale afortunadamente!!.
Nos conocemos desde nuestros comienzos. La televisión unió nuestros caminos que, con el tiempo, se bifurcaron al lanzarse Belén a la aventura del cine. Algo queda de aquella comunicadora en la actriz consagrada que ahora tengo anten mí….“¡¡¡No digas los años que nos conocemos!!!..es toda una vida,eh??..Mira, tengo muy claro que somos lo que vivimos. Es verdad que hay un momento determinado, en el que tu vida profesional da un cambio radical en el sentido de cómo te ven los demás. No ocurre de un día para otro, pero ayudan los trabajos que eliges. Sin duda alguna, Amenábar fue un punto de inflexión en mi trayectoria profesional, fue mi mejor aval y creía más en mí que yo misma, pero yo no habría dado todo lo que pude en MAR ADENTRO si no hubiese vivido todo lo anterior, incluída mi etapa en televisión con Emilio Aragón. Nunca daré la espalda a esa etapa, que está muy presente en mi curriculum y en mi vida. Lo que sí tengo claro, tanto para trabajar en televisión, teatro o cine, es que siempre tienes que tener algo dentro. La clave del éxito está en saberlo expresar de una manera o de otra»..
Cuando decidió dedicarse de lleno al mundo de la interpretación, Belén tuvo muy claro que tendría que estudiar duro y prepararse en condiciones. Su humildad y respeto hacia su trabajo ha hecho posible que, en una profesión tan cerrada como es la del mundo de los actores, la hayan aceptado, respetado y valorado.. “Yo creo que, como en todas partes, hay de todo. Te duelen ciertos comentarios o ciertas críticas, pero siempre he querido mirar adelante y, conforme ha ido pasando el tiempo, me he olvidado de ellos. Es como cuando te dicen: “Todo lo que haces funciona”. Pues no, lo que pasa es que se olvida muy rápido lo que no va bien. Es un instinto de supervivencia. Los humanos tenemos un chip especial para olvidarnos de los fracasos. Las críticas solo consigues que te resbalen cuando ha pasado un tiempo. Por lo menos en mi caso”.
Discreta y tímida, aunque sin llegar al límite enfermizo, «consigo superarlo en un escenario o al desarrollar un personaje. Ahí los actores nos abrimos y comportamos de una manera mucho más abierta y extrovertida. Muchas veces ni nosotros mismos nos lo explicamos. Yo creo que no soy tan tímida como previsora para proteger mi intimidad de la curiosidad pública. Ahí si que me empleo a fondo para blindar mi vida privada del ámbito externo”. Tal vez por eso, probar fortuna en Hollywood es algo que se le antoja lejano e innecesario. «Me hace mucha gracia cuando me plantean ésto, porque intuyo que tiene una segunda lectura con la que no estoy en absoluto de acuerdo. Lo importante son los proyectos, la historia que te propongan, no de dónde venga. Si yo tengo encima de mi mesa un buen personaje, no reparo si viene de una producción americana, francesa o española. No miro el remite para aceptar un reto. Tal y como tengo organizada mi vida, creo que no me haría nada feliz pasar cuatro meses fuera de mi casa y lejos de mi familia. Hollywood, generalmente, implica esa distancia no sólo en espacio sino también en tiempo».
SÉPTIMO se estrena el próximo día 8. A principios de diciembre la volveremos a ver en la gran pantalla en ISMAEL, interpretando a la madre del ascendente Mario Casas y -en unos meses- volverá a la pequeña pantalla con una nueva serie, cuyo rodaje le está quitando el poco tiempo libre del que dispone. Dice que su talento tiene límite, pero el horizonte se vislumbra lejano..